En estas sesiones buscamos naturalidad y espontaneidad. Nos dejamos llevar por su energía, sus gestos y su manera única de mirar el mundo. Cada foto se convierte en un retrato real de su infancia: libre, alegre y lleno de vida.
Los exteriores nos regalan una luz especial, colores vibrantes y un ambiente en el que los peques disfrutan, olvidándose de la cámara y mostrándose tal y como son. Y también nos encanta que los papás y hermanos participen, porque los abrazos, las carreras y las risas en familia son recuerdos que se atesoran para siempre.
Porque estos años pasan volando… pero las fotografías los harán eternos....
Sesiones de exteriores
¿Cuándo es el mejor momento?
Al final de la tarde, que es cuando hay una luz preciosa
¿Qué ropa llevar?
Cómoda, colores suaves; se pueden llevar varios cambios.
¿Dónde se puede hacer la sesión?
Un parque, un bosque, una playa... que te gustaría?
¿Incluye fotos familiares?
Los exteriores nos dan libertad para que juguéis con ellos con total libertad.